Lo que comenzó como una reflexión en nuestras columnas hoy flamea como un símbolo de inclusión para toda la comunidad.
Este miércoles 3 de diciembre, en el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, Gálvez vivió un hecho histórico: por primera vez, las banderas que representan los derechos, la dignidad y la inclusión comenzaron a flamear en la placita ubicada en 20 de Junio, Dorrego y Coulín.
Lo que para muchos fue un emotivo acto público, para Infinito Online tuvo un significado aún más profundo: este proyecto nació en nuestro medio, de la mano de nuestro columnista Leandro Escobedo, quien transformó una vivencia personal en una propuesta colectiva que hoy abraza a toda la comunidad.
Una idea que nació en un micrófono y se volvió símbolo de ciudad
Hace meses, Leandro compartía en nuestras columnas sus reflexiones, dudas, experiencias y aprendizajes sobre la discapacidad, provocando una enorme interacción con la audiencia.
De esas charlas, de esa ida y vuelta con los oyentes , surgió la pregunta que encendió todo:
¿Y si la ciudad tuviera un símbolo visible que reconociera a las personas con discapacidad y a quienes las acompañan?
Esa intuición se convirtió en propuesta escrita y formalizada a través de Banca Ciudadana, presentada por Leandro y aprobada por unanimidad en el Concejo Municipal.
“Lo puse en papel porque entendí que era de todos”
Durante el acto, Leandro compartió un relato íntimo y honesto sobre el origen de esta iniciativa:
“Gracias al espacio que me dio Leonardo Miola en su radio, y gracias a las conversaciones que tuvieron tanta respuesta de la gente, decidí animarme a escribir esta idea. No es solo para quienes tienen discapacidad: es para sus familias, sus profesionales, y para todos los que los acompañan cada día en este camino”.
Con emoción, recordó también su propio proceso de transformación personal:
dejar su trabajo por la pérdida progresiva de movilidad, buscar nuevos caminos, estudiar, caer y levantarse una y otra vez… hasta convertirse hoy en profesor de Economía y en un referente inspirador para muchos.
Una comunidad que acompaña
El proyecto de las banderas no se hizo solo. Formaron parte:
- Fernando “Piltra” Pignocco, colaborador en el armado y protocolo.
- La terapista ocupacional María Lorena Martínez, quien acompañó a Leandro desde su proceso de rehabilitación.
- Representantes de Taller Pinquén, Samco, Escuela Especial N° 2041 y N° 6035, incluyendo a la hermana de Leandro, un momento de enorme carga emocional.
- El concejal Santiago Pestarini, junto a ediles que entregaron la declaración de interés.
- El intendente Mariano Busso, quien destacó la iniciativa por su valor humano y comunitario.
- Mariano “Huevo” Núñez, confeccionador de las banderas.
- Y una gran cantidad de vecinos, reprsentantes de instituciones, familias y personas con discapacidad que colmaron la plaza más de lo esperado.
El Himno Nacional fue interpretado en lengua de señas por alumnos de la Escuela 6035, y el cierre estuvo a cargo de la murga Derroche de Alegría, llenando la tarde de color y aplausos.
Un acto que deja huella
La colocación de estas banderas no es solamente un gesto simbólico.
Es un recordatorio vivo de:
- la resiliencia de quienes transitan la discapacidad,
- el rol fundamental de las familias y profesionales,
- la importancia de la empatía cotidiana,
- y la responsabilidad colectiva de construir una ciudad más accesible e inclusiva.
Es también un llamado a derribar barreras, abrir puertas y ampliar oportunidades para todas las personas.
Desde Infinito Online, un agradecimiento especial
Como medio que vio nacer esta idea, celebramos profundamente que un pensamiento compartido en voz alta se haya convertido en un acto que movilizó a toda la ciudad.
Agradecemos a Leandro por su compromiso, a Lorena por su acompañamiento, a las instituciones que se sumaron, y a cada vecino que entiende que la inclusión no es un evento: es un camino colectivo.
Una vez más, Gálvez demuestra su espíritu solidario y su capacidad de abrazar causas que nos hacen mejores.